El cordon sanitario

Me gustan las telenovelas sudamericanas, creo que sobre todo por la forma de hablar de los intérpretes, por su dulzura, por el aparente respeto en el trato y como no, por la belleza un tanto explosiva de sus mujeres, curiosamente peinadas y maquilladas aún en los avatares mas adversos y violentos.
Tambien admiro su literatura; no digamos su música. Soy capaz de pasarme horas enteras oyendo tangos y consultando un pequeño diccionario de lunfardo para incorporar a mi acervo linguístico voces como paica, catrera o morfar. Luego las suelto como de pasada y quedo la mar de bien. Al menos eso pienso yo.
Y ¡qué decir de las rancheras!. Yo tenía un compañero de ilustrísimos apellidos y nada tonto que decía que para él, un momento maravilloso del día era el que transcurría en el cuarto de baño, combinando funciones fisiológicas comunes y escuchando a los Chalchaleros.
Tengo en casa una señora boliviana de aspecto triste, diligente y humilde, que no deja de enternecerme. Y hasta me sorprendo admirando la capacidad de síntesis de Valdano, pese a sus veleidades izquierdistas.
Dicho ésto y sin entrar en mayores consideraciones, creo que estoy facultado para llamar a Federico Lupi "indio",porque el conjunto de los amigos sudamericanos no llevan taparrabos, ni esgrimen lanzas, ni trafican con abalorios.
Pero este epíteto me puede causar un disgusto. Como piropear a una mujer, o acariciar la cabeza de un niño en un parque, o decir negro en lugar de "de color" o fumar un pitillo en lugar canijo y cerrado, o no hablar de "los hombres y mujeres", o decir que Oleguer es un español de Cataluña. Enfín.
Pero si Lupi, dice que soy un apestado al que hay que poner e cuarentena porque contagio, entonces no pasa nada. El cordón sanitario.
Soy de derechas, creo en la justicia social, quiero a mi patria, me encanta Inglaterra, considero primos a los portugueses, no robo, digo tacos y me embeleso mirando a Elsa Pataki. Asumo la historia de mi país en su totalidad. Tengo algún amigo rojelio , leo a Umbral y admiro a Rosa Díaz. Pero no soporto a Enric Sopena.
Siendo tan normalito ¿por qué me querrá Federico Lupi aplicar terapias eugenésicas y profilácticas?.
Hay argentinos para todo. Como Alberto Cortez, que hizo las Españas desde los años 60( ¡ay, aquellas "Palmeras"), al que un día oí decir que había padecido la dictadura de Franco. Parece ser que lo trajeron a la fuerza.
Lupi,¿ es con una o dos "tes"? Será con dos...siendo un intelectual de izquierdas...