Proteger al Ejercito
Parece ser que se está diseñando la Guardia Civil del siglo XXI. Lo que no sé es quienes son los diseñadores, pero me dá la nariz que la clave de bóveda, la almendra del asunto, es huir de de todo aquello que tenga tufillo militar. De conseguirse el objetivo, que todo parece indicar que sí, los guardias tendrán un régimen disciplinario ad hoc, el saludo militar, por muchos considerado humillante(excepto el dispensado a los políticos, ¡hay que ver que marcialidad!) se difuminará; la banda de los empleos se estrechará y todos pareceran mas iguales y en el campo de las reivindicaciones las asociaciones-sindicatos, que yo no acabo de saber interpretar sus actuaciones, harán su papel de conseguidores de mayor bienestar para los guardias.
Con la Policia Nacional pasó otro tanto y parece ser que no se resintió en su eficiencia. O sea que todo bien.
Lo que yo pido con todo encomio en estas líneas es que se vayan sin dar un portazo. El Ejercito se queda. En el siglo XXI tambien, pero con los usos y costumbres de siempre: El saludo como signo de respeto y subordinación que no de servilismo; los manidos ripios de Calderón. " aquí la mas principal hazaña es obedecer..."; relegando las luchas internas entre escalas en aras de un servicio callado y eficaz etc: ahora tambien muere gente con otros uniformes mas allá de los verdes.
Curiosamente se vá a poder arrestar a un teniente general del Ejercito en su domicilio o en establecimiento militar, pero no a un guardia.
Enfín paradojas, que a lo mejor alguien se atreve a poner en cuestion, consiguiendo así lo que no logran ni la AME, ni la AUME. Por poner un ejemplo: que nunca mas tenga que decir un ministro de Defensa que el comandante del potaaviones Principe de Asturias gana menos que el director de una sucursal bancaria de pueblo. Y lo siento por Calderón, don Pedro.
El Ejercito se queda, por favor señores sindicalistas no les echen ustedes mas miseria encima, para eso ya estan las encuestas del CIS(algunas), la indiferencia del pueblo español y la inquina de algunos políticos.
Y no les monten ustede pajarracas a los pobres oficiales togados, que se quejan de que tienen que entrar por la puerta de servicio. Y me consta que al general Mendoza, tranquilo y conciliador, le vá a dar un yuyu.
El Ejercito se queda. Solo. Salud y honor camaradas. Compañeros