UN RETO A LA INTELIGENCIA ESPAÑOLA
En épocas previas a la Transición española, un grupo de oficiales del servicio de inteligencia del estado, quizá la Tercera Seccion del Alto Estado Mayor o mas recientemente el servicio creado por el almirante Carrero, el SECED, comenzaron una labor de preparación de cambio de régimen, especialmente entre aquellos partidos de izquierda a los que se suponía deseos rupturistas, como el PC o en menor medida el PSOE. Reuniones con Felipe Gonzalez, Carrillo (vía Ceaceuscu) etc forman ya parte de la historia y son bastante conocidos.
Los oficiales de inteligencia cultivaron tambien ambientes universitarios, sindicales, empresariales, y de profesiones liberales haciendoles llegar el mensaje que en España debía producirse una transicion de modo pacífico en pos de un país en que cabrían todos y en el que cualquier ideología tendría su asiento. Quizá esto último de forma quimérica. Aquellos oficiales ocuparía posteriormente lugares de privilegio dentro de la milicia desde empleos de oficiales generales.
No sabemos qué efectividad tuvo aquel esfuerzo informativo, aunque cabe suponer que dado el predicamento y la fuerza de los ejercitos en aquella coyuntura al menos serían tenidas en cuenta sus prédicas.
En el año 2009 una noticia apenas comentada daba cuenta de una posible reunión de los príncipes con un reducido grupo de periodistas. Según la noticia SAR manifestaba su intención de renunciar al trono en el caso de que surgieran problemas. No sé si la noticia respondía a la realidad como tampoco leí mentís de la Casa Real.
Lo que se trata de transmitir en este post es que rememorando a aquellos oficiales de los servicios, deben los ahora en activo hacer llegar al ánimo de Su Alteza, cuando se produzca el tránsito, que a veces una metonimia perversa nos hace confundir el ruido con la tempestad. Y ruido se vá a producir. Ya se encargarán algunos de potenciar lo que ya ha empezado a hacer fortuna semántica: el estallido social. Lo importante es estar en el puente. que los buenos capitanes en la mayor de las veces conquistan el corazón de los suyos al final de la tempestad.
En épocas previas a la Transición española, un grupo de oficiales del servicio de inteligencia del estado, quizá la Tercera Seccion del Alto Estado Mayor o mas recientemente el servicio creado por el almirante Carrero, el SECED, comenzaron una labor de preparación de cambio de régimen, especialmente entre aquellos partidos de izquierda a los que se suponía deseos rupturistas, como el PC o en menor medida el PSOE. Reuniones con Felipe Gonzalez, Carrillo (vía Ceaceuscu) etc forman ya parte de la historia y son bastante conocidos.
Los oficiales de inteligencia cultivaron tambien ambientes universitarios, sindicales, empresariales, y de profesiones liberales haciendoles llegar el mensaje que en España debía producirse una transicion de modo pacífico en pos de un país en que cabrían todos y en el que cualquier ideología tendría su asiento. Quizá esto último de forma quimérica. Aquellos oficiales ocuparía posteriormente lugares de privilegio dentro de la milicia desde empleos de oficiales generales.
No sabemos qué efectividad tuvo aquel esfuerzo informativo, aunque cabe suponer que dado el predicamento y la fuerza de los ejercitos en aquella coyuntura al menos serían tenidas en cuenta sus prédicas.
En el año 2009 una noticia apenas comentada daba cuenta de una posible reunión de los príncipes con un reducido grupo de periodistas. Según la noticia SAR manifestaba su intención de renunciar al trono en el caso de que surgieran problemas. No sé si la noticia respondía a la realidad como tampoco leí mentís de la Casa Real.
Lo que se trata de transmitir en este post es que rememorando a aquellos oficiales de los servicios, deben los ahora en activo hacer llegar al ánimo de Su Alteza, cuando se produzca el tránsito, que a veces una metonimia perversa nos hace confundir el ruido con la tempestad. Y ruido se vá a producir. Ya se encargarán algunos de potenciar lo que ya ha empezado a hacer fortuna semántica: el estallido social. Lo importante es estar en el puente. que los buenos capitanes en la mayor de las veces conquistan el corazón de los suyos al final de la tempestad.
3 Comments:
Comparto completamente lo dicho.. Chapó como siempre por el post!
Quillo Contrapunto:
Muy interesante lo de la “metonimia perversa que nos hace confundir el ruido con la tempestad”.
Me haces ir al diccionario y copio y pego:
Tropo que consiste en designar algo con el nombre de otra cosa tomando el efecto por la causa o viceversa, el autor por sus obras, el signo por la cosa significada, etc.; p. ej., las canas por la vejez; leer a Virgilio, por leer las obras de Virgilio; el laurel por la gloria, etc.
Añado….leer al pardillo por…. leer gilipolleces.
Mas añado:
Lo importante es estar en el puente. que los buenos capitanes en la mayor de las veces conquistan el corazón de los suyos al final de la tempestad.
¿Sobra el Jefe del Estado ?
En mi opinión NOOO.
Esto lo digo por si fuera cierto lo del 2009.
Amigo contrapunto, interesantísimo el post de hoy, pero me gustaría decir que la situación política de entonces no tiene nada que ver con la de hoy. De igual manera destacaría que el "poder" del Ejército de aquellos años , no tiene nada que ver con la situación de las FAS en el momento actual.Ahora no hay "ruido de sables" hay otro tipo de "ruido", en palabras de un joven político actual.
PD.: Así que el "temible ejército franquista" coadyuvó mucho en aquella transición ...!que cosas!
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