Saturday, January 19, 2008

Morirse con carné

La poesía tiene que gustarte, de lo contrario te puede provocar risa o parecerte cursi como a mi mujer. A mi llegó a interesar en los Maristas cuando un hermano de los de babero nos dejaba unos minutos de estudio,mientras la lluvia fría golpeaba la ventanas y yo leía a Lorca "los estudiantes estudian,monotonía". Yo no éstudiaba, pintaba corazones con nombres de mujer.
De ahí, de Rubén Darío y de las "décimas o espinelas", de obligado y literal conocimiento alguna de ellas(la sigo recitando), de ahí, digo, no he pasado.
Hubiera podido redimir mi culpa pero la poesía social tiznada de grisú y tinta de ciclostyl del Comité, me perdieron para siempre. Quiero decir que yo perdí a la poesía para siempre.
Ha muerto Angel González, poeta y comunista que ya son ganas de despistar y la prensa se deshace en ditirambos. La misma prensa que se fué al cine cuando murió Torrente Ballester.
Parece ser que Angel Gonzalez cantaba rancheras y en el Cienfuegos cubano o en el Floridita dejaba oir con simpar donosura usted es la culpable/de todas mis angustias/de todos mis quebrantos.
Esta es la parte, por desconocimiento de su obra, que mas me interesa de Angel Gonzalez, la falta de pudor musical. Ahora que a los muertos en acto de servicio se les entierra con los acordes de Pau Casals y se huye como de la peste de los metales y parches marciales, no está de mas que los hombres de rimas y ensoñaciones reivindiquen, en sus noches de vino yrosas, ,la magia de expresar el amor a una mujer con el verso profundo y simple de una ranchera.
Lo hacía a su manera Baudelaire ahíto de absenta y treponema. Lo hace en el decúbito final Fernan Gomez, al que sus deudos le ponen el último y definitivo Yira o el mismo Paco, que como ya dijimos aquí ,acariciaba a su gato a los sones sincopados y tristones de Tatuaje.
Lo hacía el heredero de recuadro de Umbral en Manolo el Manzanilla comiendose, a las claritas del día, un pollo con tomate o el resto de juntaletras bohemios a golpe de machaquito y relente.
Este artículo tristón lo escribo por eso, porque estoy tristón y porque me ha emputecido un pisaverde relamido y cursi que dice en "El Mundo" que aquí solo se oye música cutre.
No te jode, vamos a dejar volar el corazón con zarzaparrilla, mientras ponemos los ojos en blanco a los sones de Rachmaninof.

0 Comments:

Post a Comment

<< Home