Tintín,masón
Releo el libro de Daniel Stulin sobre el Club de Bilderberg y se me hielan las mientes. Lo dominan todo, la educación, las grandes rotativas y cadenas de televisión y radio, las modas,las mentes en definitiva. Al menos eso sostiene Stulin. ¿Qué fué primero la Escuela de Frankfort o la masonería? . Otra pregunta, ¿es casual el ataque incesante a la Iglesia católica?. Muchas casualidades, muchas preguntas.
A Tintín la progresía se las tenía juradas. Por anticomunista. Ahora me entero de que también fué masón.Y es que entre personajes célebres de la historia y el Pato Donald, Mickey, etc. lo han copado todo.
He sentido como si una albaceteña me penetrara el hígado, y no por ojeriza ideológica a nada, sino porque Tintín ha sido el adalid de la claridad y nunca se metió en cuestiones políticas mas allá de su lucha contra el comunismo opresor. Pues nada, también era masón, al decir de un conferenciante en una librería barcelonesa que lleva el nombre de un mecenas, también hijo de la viuda.
Siguiendo a Stulin los bildebergers mueven los hilos de la tramoya mundial y quien asiste como invitado habitual, caso de Cebrián, poseen en cantidades ingentes poder, información etc.
Vamos a ver si ésto queda probado en el caso del diario que él representa y que está pasando por auténticas dificultades. De ser así, la tesis de Stulin quedaría en cierta forma refrendada.
Releo el libro de Daniel Stulin sobre el Club de Bilderberg y se me hielan las mientes. Lo dominan todo, la educación, las grandes rotativas y cadenas de televisión y radio, las modas,las mentes en definitiva. Al menos eso sostiene Stulin. ¿Qué fué primero la Escuela de Frankfort o la masonería? . Otra pregunta, ¿es casual el ataque incesante a la Iglesia católica?. Muchas casualidades, muchas preguntas.
A Tintín la progresía se las tenía juradas. Por anticomunista. Ahora me entero de que también fué masón.Y es que entre personajes célebres de la historia y el Pato Donald, Mickey, etc. lo han copado todo.
He sentido como si una albaceteña me penetrara el hígado, y no por ojeriza ideológica a nada, sino porque Tintín ha sido el adalid de la claridad y nunca se metió en cuestiones políticas mas allá de su lucha contra el comunismo opresor. Pues nada, también era masón, al decir de un conferenciante en una librería barcelonesa que lleva el nombre de un mecenas, también hijo de la viuda.
Siguiendo a Stulin los bildebergers mueven los hilos de la tramoya mundial y quien asiste como invitado habitual, caso de Cebrián, poseen en cantidades ingentes poder, información etc.
Vamos a ver si ésto queda probado en el caso del diario que él representa y que está pasando por auténticas dificultades. De ser así, la tesis de Stulin quedaría en cierta forma refrendada.